domingo, 28 de diciembre de 2008

martes, 21 de octubre de 2008

Entrada visita cultural.



Cortesía de Juan Carlos Husillos.

jueves, 5 de junio de 2008

Dais of being wild- Wong Kar-Wai.


-Había un pajaro que no
dejaba de volar, hasta que
se moría. Nunca fué a
ningun lugar, porque murió al
principio.
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Hace algún tiempo, decidimos subir estas fotos a un presunto foro de fotografía (y todo lo demás), con la intención de abrir un debate,( que debía surgir espontáneamente) acerca de la conveniencia o no de fotografiar el dolor, la agonía, la muerte, y todo tipo de situaciones verdaderamente dramáticas

Las expectativas naturalmente no se vieron cumplidas, entre otras cosas, porque coincidió casi en el tiempo con la concesión a Manuel Vilariño del Premio Nacional de Fotografía, en cuya colección aparecen varios pájaros muertos...Y lo que en principio parecía ser un aliciente añadido, se convirtió en un reproche acerca de dónde se consiguen pájaros muertos para hacerles fotos, y lo mal que olían estas fotos... Que por otra parte y bien pensado, hacer fotos a un cadáver y que huelan mal es el summun del realismo fotográfico...

Por supuesto cualquier intento de debate, se vio zanjado ante la posibilidad de tener que confesar públicamente que los pájaros ya estaban muertos antes de que yo llegara, que es lo que suele pasar en el campo cuando hay una tormenta fuerte, como puede comprobar cualquiera que pasee por el mismo, siempre y cuando se salga de los caminos marcados.

En fin, si le hiciésemos fotos a alguien agonizante, hambriento, o con la cara llena de moscas y mierda, tal vez nos dieran un premio y recibiríamos loas por doquier, pero son solo pájaros..., solo nos dan un poquito de pena, a fin de cuentas se trata de “una forma menor de muerte”.

------------------------------------Angel Herreros/Clara Bermejo.------

domingo, 25 de mayo de 2008

Asi es la vida.


Cortesia de Celia Piñero.

martes, 13 de mayo de 2008

El año del cinco.


CINCO ROSAS PARA EL AÑO DEL CINCO

Nuestro año del cinco.
Cinco por cinco. Venticinco años de una copa de cava, de una vorágine con control, del principio de otras copas y otras vorágines.
Cinco por cuatro: Ara con cuatro columnas donde realizar la liturgia de cada día.
El año del cinco.
Cinco por tres. Quince años del asentamiento, de multiplicar por dos la grandeza que parte de nosotros: cuatro ojos como cuatro gemas, rosa de los vientos que marca y decide nuestro rumbo cuando estamos en la deriva o en la calma.
Cinco por dos: deseos de tener lo que se desconoce de antemano y sin embargo se tiene y cuando se tiene se descubre que siempre el deseo había existido.
Nuestro año del cinco.
Cinco por uno. El Lar construido tiene forma, alma y razón y celebra su año del cinco.
Y en el principio, en el Caos origen de todas las cosas, hubo un cinco por seis. Treinta años de una mirada de ojos grandes, profundos y que en el silencio que rodea el ruido de las voces amigas podía decir todas las cosas.
Levanto mi copa y brindo contigo y en la mirada el abrazo y en el abrazo el sentido.

Clara Bermejo

jueves, 17 de abril de 2008

domingo, 30 de marzo de 2008

domingo, 23 de marzo de 2008

Saturnino.


"Amigo Saturnino masculino singular..." (Rosendo Mercado).

domingo, 9 de marzo de 2008

domingo, 2 de marzo de 2008

Birnam.


El humo cegaba sus ojos y el sonido metálico se mezclaba con los aullidos de los aún vivos. Y se sentía cansado, muy cansado. Le aliviaba pensar que llegaba el fin de la contienda.

Oyó su nombre y giró a la izquierda, era una voz amiga, querida.... le vio caer con el pecho cruzado por la espada enemiga, sus negros ojos le miraban ya sin vida. Amigo, amigo del alma; fiel escudero en horas de guerra, hermano en instantes de paz.

No percibió al jinete que se acercaba rápido blandiendo su lanza con la mirada fija en él. Sintió el golpe brutal sobre el costado derecho mientras miraba los ojos ya muertos de su amigo. Y sintió frío. Un segundo golpe en la cabeza. La sangre que le caía sobre la frente era cálida, pero sintió frío. Giró hacia el jinete que reía enseñando dientes escasos y podridos.

Y entonces comenzó a ver que los cadáveres se erigían como árboles y le rodeaban mientras él caía de rodillas. Estaba dentro de un bosque umbroso y húmedo, nada sentía excepto frío...

De pronto todo se iluminó en tonos dorados y cálidos. Entonces supo que ella vendría a buscarlo, vestida de blanco.
Ya no la temía, deseaba que llegara y le llevara con ella.

Le encontraría con el rostro sereno, sereno....

”.......I will not be afraid of death and bane Till Birnam forest come to Dunsinane.”

..............................................Clara Bermejo

Week-End.








- ¿hay comida sin tractores?
- El final de la era gramatical,
y el principio del resplandor.
- La virtud del vicio.
- Si compran el saber es para revenderlo.
- No sabemos nada.
- ¿estáis en una película o en la realidad?
- ¿quién va a creer a una criatura tan horrible?
- Aceptación servil de la vida cotidiana.
- ¡Que vamos a hacer!
- El alma profundamente sacudida.
- Silencio.

Atxabiribil.


'Dicen que en las playas de Atxabiribil, yace un dragón convertido en piedra...

Dicen tambien, que en días como los de hoy, se escuchan hondos lamentos.....

Cuentan que, hace muchos años -demasiados años- , un mortal desafió a los dioses con planteamientos atrevidos y preguntas complicadas para darle aún respuestas, por lo que éstos insultados por la osadía del joven, le convirtieron en una bestia alada para que vagase por los mundos en busca de las respuestas a sus preguntas.

Él para siempre y sin quererlo, sería la tierra y el fuego.

Atxabiribil le llamaban, y al convertirle en dragón, tuvo la mala fortuna de olvidar todo lo que era, todo lo que tenía, y sobre todo, lo que amaba.
Años y años eternos, preguntando a los árboles, a los vientos y corrientes, a las montañas y nubes, a todo lo vivo incluido lo inanimado, tanto quería saber que le llevó al olvidar lo que ciertamente buscaba.

Huérfano del todo, de no saber ni quien era, llegó el día que empezó a encontrarse cansado. Sus escamas verdes ya no se regeneraban, sus alas empezaban a estar muy cuarteadas, sus ojos sin brillo, y su estómago apenas guardaba el fuego que bombeaba su agotado corazón...

Volando una mañana, sobre un mar en calma de una tierra jamás visitada, recordó un color verde, y estos le llevaron a unos ojos, Atxabiribil, empezó a acordarse de ella. Abatido. Desconsolado. Arrepentido y emocionado por el feliz reencuentro, aleteó con fuerza hasta posar su descomunal cuerpo sobre la orilla, y empezó a hablarla desde dentro, como ha de hacerse, avivando asi su poca llama...

(...)

Dicen que en Atxabiribil, hay un dragón semienterrado que pide perdón a su amada convertida en mar salada...

Ella, para siempre y sin quererlo, sería el viento y el agua.

Yo sé, que en Atxabiribil, hay unos amantes que aún se aman.'

.................................N .E. (La Maga). ....................